Nuestra dieta que se caracteriza por comer mucho, promueve el deterioro de las células cerebrales, Comer alimentos que contengan mucha grasa o azúcar se asocia con un estado de inflamación de la región cerebral relacionada con la memoria a corto plazo, en consecuencia, tener una dieta de estas características, afecta el sano desarrollo de las estructuras cerebrales que determinan una buena memoria.