Una de las situaciones más recurrentes que se experimentan con la llegada de los años y la vejez es el deterioro de las funciones visuales o también llamado deterioro macular. En ocasiones, la pérdida de visión llega sin ser notadas por los que la afectan, sin embargo los síntomas son muchas veces posibles de notar. ¿Cómo saber si tu visión se está deteriorando? Conoce más sobre los síntomas en el artículo de hoy.
El ojo se compone de distintos e importantes estructuras para proveernos la visión. En esta ocasión profundizaremos particularmente en la retina y sus componentes para conocer cómo el avance de la edad puede deteriorar sus principales funciones.
La importancia de la retina y sus componentes.
La retina es la capa de tejido que se encuentra en la parte posterior del globo ocular y se caracteriza por ser sensible a la luz. Cuando los estímulos que vemos en el exterior pasan a través del cristalino del ojo y se enfocan en la retina, ésta las convierte en señales eléctricas y las envía por medio del nervio óptico al cerebro logrando que captemos la imagen.
Si nos ubicamos al centro de la retina, en su parte interior, se encuentra la mácula. Esta es una pequeña estructura de color amarilla (se percibe casi como una mancha) y nos pemite obtener la visión de los detalles y el movimiento. Es esta estructura la que nos permite distinguir las caras de las personas y desarrollar la lectura sin inconvenientes. Al interior de la mácula se encuentra la fóvea, la cual tiene un aspecto cóncavo y su función es permitir que la visión sea más nítida. Es por eso que cualquier tipo de problema o anomalía en estas estructuras podrían afectar la visión de una persona.
Deterioro macular asociado a la edad (DMAE)
Esta anomalía sucede comúnmente en personas por sobre los 50 años. Se define como una enfermedad degenerativa irreversible que ocurre en la mácula (área central de la retina), por lo tanto puede afectar la visión central, la fijación y la distinción de colores.
La DMAE es la primera causa de pérdida visual irreversible en el mundo occidental en personas mayores de 50 años. De hecho, en España el porcentaje de personas mayores de 65 años que sufren esta enfermedad es del 13%, mientras que entre los mayores de 75 años, se estima que el 30% está afectado en alguna proporción.
¿En qué situaciones afecta el DMAE?
Al mácula, al ser responsable de las funciones ya mencionadas, puede afectar actividades tan frecuentes como leer, ver la televisión o conducir y los síntomas que presenta son:
•Visión central borrosa, conservándose la visión periférica.
•Alteración en la forma de las imágenes ( metamorfopsia)
•Alteración en el tamaño de las imágenes: mayor (macropsia) o menor (micropsia)
Tipos de Deterioro Macular Relacionados a la Edad.
El deterioro de la mácula se puede diagnosticar en dos formas.Sin embargo, se establece que los pacientes pueden pasar de un estado a otro. Estas son:
- DMAE seca o atrófica: Esta es la forma más frecuente de la enfermedad (un 90% de los casos) y se diagnostica cuando se produce una pérdida progresiva de células nerviosas en la mácula. Si bien esto puede provocar la pérdida de visión total, la progresión de la enfermedad es lenta que puede incluso tomar décadas.
- DMAE húmeda o exudativa: Si bien, este tipo de DMAE es la menos frecuente (10 % de los casos), puede ser muy agresiva y conducir a la pérdida de visión central en poco tiempo (semanas o meses). En ella aparece un nuevo tejido bajo las capas más profundas de la retina que crece, exuda y puede sangrar (membrana neovascular)
La buena salud de la retina y la mácula es esencial para una visión óptima, por lo que ante cualquier pérdida leve de visión que pueda aparecer se debe consultar a una especialista. El diagnóstico precoz de ambas formas puede mejorar la progresión de la enfermedad.